Es bien sabido que las actividades económicas de cualquier persona u organización generan tanto impactos positivos como negativos. Estos efectos pueden alcanzar una gran escala e impactar sobre el entorno físico y social en el que actúan.
Las empresas, como parte constituyente y determinante del tejido social y económico, no pueden desligarse de su verdadera relación con la comunidad, del impacto que sus operaciones tienen sobre los trabajadores, la gente y el medio ambiente.
En virtud de este compromiso, las organizaciones deberían preguntarse si su modelo de negocios, estructura y funcionamiento son socialmente responsables, partiendo de cuestiones básicas como el establecimiento de políticas no discriminatorias entre sus empleados o postulantes, y atendiendo a condiciones de trabajo más "humanas". Los contextos de alta presión, como los que suele generar la vorágine del capitalismo global, son en buena medida responsables del surgimiento de socio-psicopatologías severas entre los trabajadores de todos los niveles.
También deberían preguntarse si los recursos que utilizan para sostener sus modelos de negocios consideran objetivos tales como garantizar la salud, el confort y la productividad de los empleados, y si están usándolos eficientemente.
Hasta hace unos años, las compañías y las industrias se preocupaban por prevenir o producir la menor cantidad posible de sustancias contaminantes. Hoy en día, los esfuerzos están concentrados también en examinar cada eslabón de la cadena productiva de los materiales que se utilizan.
Es sustancial, ético e imprescindible que las empresas se ocupen del impacto de su negocio y actividad en el medio ambiente y en la comunidad.
¿Cómo alcanzar esta meta? Como siempre, la educación será la clave para sensibilizar a las actuales y futuras generaciones de ejecutivos y empresarios acerca de la cuota de responsabilidad y solidaridad que las empresas le deben a la sociedad.
Aún queda mucho por hacer...
Fuente: Víctor Feingold. Editorial del número 13 de la revista Facility Magazine.
No hay comentarios:
Publicar un comentario